Esta torre vigía preciosa (atalaya o torreón árabe del siglo XIV, de planta circular y desarrollo cilíndrico) que se sitúa dentro de Sierra Elvira (Los árabes vieron en su perfil la silueta de un ave iniciando el vuelo, y por eso
Los vigilantes apostados en un torreón hacían la ahumada en la chimenea, quemando el esparto húmedo (si era de día), o encendiendo un gran fuego en la terraza (si era de noche). Y así, de torre a torre, hasta alertar a la alcazaba más próxima, que tocaba a rebato formando a la tropa en el patio de armas, a la espera del jinete que había partido desde la atalaya fronteriza para dar noticias concretas. Si la guarnición de la fortaleza era suficiente para atajar el peligro, allí finalizaba el sistema de señales y de alertas; en cambio, si el ataque o incursión enemiga era de mayor envergadura, continuaban las señales entre torres y alcazabas, y la galopada de relevos de los mensajeros hasta llegar a la capital, a Granada, que era alertada por las señales de su torre vigía más próxima, la torre vigía de Sierra Elvira. Este sistema radial de alerta era completado con otros circuitos secundarios de atalayas que avisaban a determinadas poblaciones y castillos.
Se puede llegar fácilmente y merece la pena no solo por lo bonita que es sino también por lo extraordinario del paisaje que se puede observar desde la misma.
El domingo, 21 de noviembre, los senderistas de Vva.Mesía, disfrutaremos de esta zona. Subiremos hasta la ermita de los 3 Juanes, luego a la atalaya, para bordear Sierra Elvira hasta la cantera de la Raja Santa. Esperemos que el tiempo nos acompañe y podamos disfrutar de bellas panorámicas. Salu2 y pedal-pedal.
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